Una vez se ha planificado, organizado la estructura formal de la empresa, gestionado al equipo humano siendo un buen líder capaz de motivar a los trabajadores y tomar decisiones adecuadas, ha llegado la hora de controlar que todo va bien.
La función de control es la que permite a la empresa saber si se están consiguiendo los objetivos planificados y, en caso de no que no sea así, detectar las desviaciones ocurridas para su posterior corrección por parte de los responsables.
FASES DE LA FUNCIÓN DE CONTROL
1 - ESTABLECIMIENTO DE ESTÁNDARES
Hay que fijar el nivel mínimo de consecución de nuestros objetivos, los cuales deben ser medibles (producir 6.000 unds. / año).
2 - OBTENCIÓN DE INFORMACIÓN
Para conocer los resultados obtenidos y poder aplicar medidas correctoras a tiempo usaremos diferentes herramientas de control, tales como:
CONTROL PRESUPUESTARIO: Consiste en controlar los ingresos y gastos de la empresa para saber si cumplimos con lo planificado, si hay que financiarse…
AUDITORÍAS: Sirven para controlar aspectos globales y específicos de la empresa: contabilidad, finanzas, inversiones… Pueden ser:
Internas: Llevada a cabo por la propia empresa.
Externas: Realizada por empresas otras especializadas
ANÁLISIS ESTADÍSTICO: Comparando datos actuales con los de otros años u otras empresas.
3 - DETECCIÓN DE DESVIACIONES
Consiste en comparar los resultados obtenidos con los estándares propuestos por la empresa. (estamos produciendo 250 unds. / mes).
4 - APLICACIÓN DE MEDIDAS CORRECTORAS
Hay que subsanar desviaciones relacionadas con:
La mala ejecución de las estrategias. (el personal necesita una mejor formación)
Mal planteamiento de objetivos iniciales. (el objetivo real debía ser 3,000 unds. / año)